El sueño de Venezuela de clasificar por primera vez a un Mundial volvió a frustrarse y, con él, se produjo un terremoto deportivo y político. La derrota de la Vinotinto por 6-3 frente a Colombia en Maturín, que la dejó fuera de la Copa del Mundo 2026, derivó en una decisión inmediata: la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) anunció el despido del técnico argentino Fernando “Bocha” Batista y de todo su cuerpo técnico.

“Tras concluir el proceso eliminatorio rumbo al Mundial de la FIFA 2026, Batista ha sido cesado en sus funciones como director técnico de la selección nacional absoluta, junto con todo su cuerpo técnico”, informó la FVF en un comunicado. Y agregó: “La decisión responde al hecho de que no se alcanzaron los resultados deportivos establecidos como objetivo en este ciclo”.

La intervención del presidente Nicolás Maduro terminó de sellar el destino del entrenador argentino. En un acto transmitido por cadena nacional, el mandatario aseguró que “ayer tuvimos una dolorosa pérdida. Venezuela toda exige una reestructuración del cuerpo técnico de la Vinotinto, una reorganización de la estrategia, de la doctrina y de la línea de combate y de trabajo”. Incluso fue más allá y habló de una transformación total: “sea reestructurada desde sus cimientos” para dejar atrás el estigma de ser la única selección sudamericana que nunca jugó un Mundial.

Nicolás Maduro pidió la salida del Bocha Batista (Crédito: X)

Maduro subrayó también la importancia creciente del fútbol en la vida social del país. Según dijo, en los últimos años “se masificó y casi que desplazó el béisbol como deporte nacional”, lo que multiplica la presión por alcanzar un objetivo que sigue siendo esquivo.

La Vinotinto llegó a la última fecha de las Eliminatorias en el séptimo puesto, posición que otorgaba un lugar en el repechaje intercontinental. Sin embargo, la caída ante Colombia y el triunfo de Bolivia por 1-0 frente a Brasil en El Alto cambiaron el panorama: los bolivianos sumaron 20 puntos, dos más que los venezolanos, y se quedaron con el cupo al repechaje.

La decepción fue doble. En Maturín, los locales se habían puesto en ventaja dos veces (1-0 y 2-1), pero la selección cafetera —ya clasificada— terminó imponiéndose con contundencia. La goleada no solo borró las chances deportivas, sino que encendió las críticas hacia el cuerpo técnico.

El comunicado de la salida del Bocha Batista (Crédito: Instagram)

La suerte del “Bocha” parecía echada desde el mismo martes por la noche, cuando pidió disculpas tras el partido y evitó dar la conferencia de prensa. Al día siguiente, la FVF oficializó su salida. De todas formas, el propio Batista intentó dejar su versión. En un mensaje publicado en la red social X aseguró que su salida se produjo “de común acuerdo” luego de no alcanzar “el objetivo trazada desde el inicio, que era llevar a Venezuela por primera vez a jugar un Mundial”. El Bocha es hermano de Sergio “Checho” Batista, campeón del mundo en México 1996 junto a Maradona. 

El entrenador agradeció a la dirigencia y se mostró optimista sobre el futuro: “La convicción de que esta decisión es lo mejor para que la selección pueda seguir buscando su camino”, señaló, porque Venezuela “tiene mucho talento y futuro”. También expresó gratitud a los futbolistas y a la hinchada: “Valoro especialmente la disciplina y el compromiso de los jugadores para defender la camiseta de la Vinotinto en todo momento. Al pueblo venezolano le agradezco el aliento y apoyo en cada partido. Sentimos siempre el respaldo y la pasión de una hinchada que merece lo mejor”.

Batista, que cumplió 55 años en agosto, había asumido el 10 de marzo de 2023 tras la renuncia de José Pekerman. Durante su gestión, la Vinotinto mostró momentos de evolución y carácter competitivo, como reconoció la propia FVF en su comunicado, pero los resultados finales no alcanzaron las expectativas.