Carlos III busca cocinero, pero sus exigencias espantan
Tras el despido repentino de su sous chef, Su Majestad abrió una nueva convocatoria para cubrir el puesto en la cocina real. Sin embargo, las extenuantes peticiones del monarca generan rechazo y alimentan una larga lista de renuncias dentro de la Casa Real.
El Palacio de Buckingham vuelve a estar en funcionamiento tras el anuncio de una nueva búsqueda laboral: se necesita cubrir el puesto de cocinero en la residencia real. El llamado llega luego del despido del sous chef, una situación que no sorprende, ya que no es inusual que trabajadores del palacio sean apartados de sus cargos debido a las estrictas exigencias del entorno.
Considerada una de las cocinas más prestigiosas del mundo por pertenecer a la realeza, el puesto ofrece la posibilidad de trabajar también en otras residencias reales y para mandatarios internacionales.
Las decisiones del rey Carlos III en materia laboral generan noticias desde hace tiempo. La semana pasada trascendió que once de los doce jardineros de la residencia familiar de los reyes Carlos y Camilla, en Gloucestershire, renunciaron en los últimos dos años. Según se especula, el motivo estaría relacionado con el trato y las condiciones laborales impuestas por la Casa Real. Ante exigencias consideradas extremas, los trabajadores optaron por buscar nuevas oportunidades lejos de las particularidades del monarca en su afición por la jardinería.
Las excentricidades del monarca son conocidas desde hace años. Carlos III cuenta con un valet que le prepara el baño con agua tibia, otro que le cepilla los dientes y uno más que se encarga de vestirlo. Las sábanas se cambian a diario y los cordones de sus zapatos se planchan al menos tres veces al día por razones protocolares.
Desde que recibió su diagnóstico de cáncer el año pasado, el rey implementó una dieta sumamente controlada. No almuerza, limita el consumo de carnes blancas y rojas, y prioriza alimentos ricos en fibra, como frutas frescas, pan integral y muesli. Además, adhiere al veganismo intermitente, una práctica que combina hábitos veganos durante ciertos períodos del día o la semana.
En 2022, el vocero oficial de la Casa Real reveló una lista de renuncias y despidos que ese año se convirtieron en un verdadero escándalo. Varios trabajadores fueron desvinculados, y desde los sindicatos calificaron la situación como "cruel". Más de 100 empleados de Clarence House denunciaron haber recibido avisos de despido de forma repentina, luego del ascenso de Carlos de Gales al trono.
Los avisos llegaron durante el período de luto por la muerte de la Reina Isabel II, y muchos contratos tenían como cláusula de expiración el fallecimiento de la monarca. A partir de ese momento se abría un plazo de seis meses en el que el nuevo rey podía decidir si mantenía, reasignaba o despedía al personal. Aunque se aclaró que la mayoría de los despidos correspondían al Palacio de Buckingham y no a Clarence House, las críticas no tardaron en llegar.