El compromiso de Taylor Swift y Travis Kelce es, sin lugar a dudas, la noticia del año. La primicia recorrió el mundo en cuestión de horas y superó los 30 millones de reacciones en redes sociales. La repercusión fue tal que incluso figuras internacionales se sumaron a la conversación, entre ellas el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El mandatario, quien hace años viene mostrando una postura vehemente en contra de la artista, salió a hablar y sorprendió con sus declaraciones. "Les deseo mucha suerte. Creo que es un gran jugador, un gran tipo. Ella es una persona estupenda. Así que les deseo mucha suerte", afirmó Trump, mostrando un rotundo cambio en su visión. 

Al parecer, el fanatismo de Trump por Taylor Swift data de hace varios años. En 2017, Melania Trump publicó en su cuenta de Facebook un vídeo en el que su marido conducía su Rolls-Royce mientras escuchaba el tema Blank Space. Sin embargo, el amor por sus canciones terminó cuando la artista marcó su postura política.

Cuando la cantante respaldó al demócrata Phil Bredesen que se enfrentaba a la republicana Marsha Blackburn, Trump salió a decir que “le gustaba un 25% menos su música”. Luego, en las elecciones presidenciales de 2024, Taylor hizo una publicación en sus redes sociales donde instaba a votar a Kamala Harris.

“Votaré por Kamala Harris y Tim Walz en las elecciones presidenciales de 2024. Voto por Kamala porque lucha por los derechos y las causas que, en mi opinión, necesitan un guerrero que las defienda. Creo que es una líder firme y talentosa, y creo que podemos lograr mucho más en este país si nos guiamos por la calma y no por el caos”, escribió Swift en Instagram.

La publicación, que acumuló más de 11 millones de reacciones, causó la furia instantánea de Trump. “¡ODIO A TAYLOR SWIFT!”, escribió el ahora mandatario estadounidense en X (ex Twitter) cinco días después del apoyo público de la intérprete de “Cruel Summer” a la candidata Kalama Harris.