El fentanilo contaminado con bacterias Klebsiella pneumoniae y Ralstonia pickettii dejó en Argentina más de 100 víctimas fatales en cuestión de días. La magnitud del caso hizo que muchos recordaran la película de Netflix “El Negocio del Dolor”, protagonizada por Chris Evans y Emily Blunt, que expone cómo la industria farmacéutica norteamericana se enriqueció gracias a la comercialización de este opioide.

La ficción, inspirada en el artículo periodístico The Pain Hustlers de Evan Hughes publicado en The New York Times, relata cómo la empresa Insys Therapeutics impulsó de manera negligente el uso del fentanilo líquido Subsys, ocultando los riesgos y priorizando las ganancias.

La crisis que atraviesa el país parece un calco de lo que la película denuncia: la falta de controles, la circulación ilegal y la connivencia entre farmacéuticas y médicos. En Argentina, el fentanilo se utilizaba de manera controlada como analgésico en casos de dolor extremo, pero la versión adulterada que se distribuyó en las calles disparó la tragedia sanitaria más grave desde el escándalo de los caramelos de propóleo en los años noventa.

Lo que en la pantalla grande aparece como una conspiración corporativa, en la realidad argentina se transformó en un escenario devastador donde la droga 50 veces más potente que la heroína se convirtió en una trampa mortal para decenas de consumidores.

Estrenada en 2023, “El Negocio del Dolor” combina ficción y hechos reales para mostrar cómo los representantes de laboratorios prescribían fentanilo sin medir consecuencias. La directora Wells Tower construyó una narrativa crítica sobre la impunidad farmacéutica, que hoy cobra una inquietante vigencia frente a la situación argentina.

'El negocio del dolor' (crédito: YouTube)

El paralelismo es inevitable: así como en Estados Unidos el fentanilo provocó la epidemia de opioides, en Argentina se convirtió en sinónimo de muerte y desesperación. La pregunta que queda flotando es si se aprenderá de la ficción para enfrentar una realidad que ya dejó cientos de familias destruidas.