Nicolás de Dinamarca: el príncipe rebelde que eligió la moda
Heredero de una de las monarquías más antiguas, el joven dejó atrás la carrera militar para dedicarse al modelaje y a su historia de amor
Nació en el seno de una de las monarquías más antiguas del mundo, pero eligió un camino distinto al esperado. Hoy, Nicolás de Dinamarca combina su título nobiliario con la moda y una relación sólida junto a Benedikte Thoustrup. Bautizado como Nikolai William Alexander Frederik, el joven es hijo mayor de Joaquín de Dinamarca y de la condesa Alejandra de Frederiksborg. Nieto de la reina emérita Margarita II y sobrino de los actuales reyes Federico X y Mary, desde 2022 es conde de Monpezat, tras la decisión de su abuela de retirarle el título de príncipe.
Aunque la familia real danesa fue clave en su vida, Nicolás decidió no seguir el camino tradicional de sus parientes. En lugar de abrazar plenamente las obligaciones de la realeza, eligió enfocarse en una de sus grandes pasiones: la moda.
Siguiendo la tradición, al cumplir 18 años ingresó en la academia militar, pero apenas permaneció allí dos meses. En 2018 anunció públicamente que no se sentía cómodo y que ese no era su lugar. Su mente, en cambio, estaba puesta en las pasarelas.
Ese mismo año debutó en la moda internacional, desfilando para Burberry en Londres y para Dior en París y Tokio. “Siempre me he considerado un alma libre”, aseguró en una entrevista con Numéro. A la par, continuó sus estudios en Administración de Empresas en la Copenhagen Business School, donde se graduó en 2024, demostrando que podía compaginar las aulas con las pasarelas.
En 2019 firmó con la agencia Scoops Models, lo que marcó el inicio de su carrera profesional en la moda. Desde entonces no ha dejado de trabajar en campañas publicitarias, editoriales y desfiles internacionales. Actualmente, está representado por agencias en Australia, donde vive con su novia, y en Copenhague. Incluso compartió sello con modelos españoles como Juan Betancourt y Xavier Serrano.
Nicolás reconoce que gran parte de su inspiración viene de su abuelo paterno, Henrik de Dinamarca. “Cuando veo sus fotos, pienso: Menudo icono. Solo le conocí en sus últimos años, pero en las fotos de cuando era joven parece James Bond”, confesó a la revista Euroman. Su estilo refleja ese clásico sofisticado, con trajes impecables, pero adaptado a una versión más vanguardista y moderna que lo distingue en la industria.
En lo personal, Nicolás mantiene una sólida relación con Benedikte Thoustrup, a quien conoció durante su paso por el internado privado Herlufsholm. “Durante el primer año y medio solo fuimos amigos... hacia el final del segundo año me invitó a dar un paseo a la gasolinera local, que era como se pedía una cita en el colegio. Es curioso en qué se ha convertido más de siete años después”, contó Benedikte en una entrevista para FASHION.
Con más de 68.000 seguidores en Instagram, Benedikte empieza a despuntar en la moda como creadora de contenido y modelo. Se graduó en la misma universidad que Nicolás y ha desfilado en la Copenhagen Fashion Week para firmas como OpéraSPORT.
La joven danesa ha sido un gran apoyo en la carrera de su pareja y juntos se han convertido en un tándem inseparable. Han asistido a eventos de moda en Copenhague, Milán y, recientemente, debutaron como invitados en el Festival de Cine de Venecia, gracias a su vínculo con la casa Armani.