A 24 horas de que se diera a conocer la noticia de la aparición de una obra de arte robada por los nazis en la década del 40 en Ámsterdam, se informó que fue allanado el domicilio donde se suponía que debía estar. Sin embargo, el cuadro no se encontró. Patricia Kadgien, dueña del inmueble y familiar del funcionario nazi Friedrich Kadgien, no quiso dar declaraciones.

La Justicia federal de Mar del Plata abrió un expediente para esclarecer el caso de “Retrato de una dama", la obra del pintor italiano Giuseppe Ghislandi (1655-1743) que formaba parte de la colección del comerciante judío Jacques Goudstikker, quien fue asesinado en 1940 cuando huía de los nazis. Se estima que el valor de la pintura podría alcanzar los 70.000 euros.

Esta pintura fue comprada por Friedrich Kadgien, un oficial de las SS cercano a Hermann Göring, que murió en Buenos Aires en 1978. Se cree que, tras escaparse a Suiza, el funcionario se estableció en Argentina. A raíz de una investigación que llevó a cabo el diario neerlandés Algemeen Dagblad (AD), se supo que el cuadro lo tenía Patricia, una empresaria de 59 años.

La casa de Patricia Kadgien en Mar del Plata
La casa de Patricia Kadgien en Mar del Plata

Un reportero de AD inició hace una década un trabajo de investigación sobre los objetos robados a judíos en Países Bajos. Si bien intentó contactarse en reiteradas ocasiones con los descendientes de Kadgien. nadie quiso hablar nunca del oscuro pasado del exfuncionario nazi.

Pero, cuando Patricia decidió poner en venta la casa, la inmobiliaria Robles dio a conocer imágenes del interior donde se veía el cuadro colgado en la pared del living. El fiscal federal Carlos Martínez recibió una alerta de Interpol y de la Aduana este lunes por la mañana y, de inmediato, se ordenó un allanamiento, a cargo de la DUOF Mar del Plata.

"Retrato de una dama", obra de Giuseppe Ghislandi
"Retrato de una dama", obra de Giuseppe Ghislandi

Si bien la pintura no fue hallada en el lugar, se secuestraron láminas y grabados, celulares y varias armas. Entre las láminas se encontró una serie referente a una exposición de pinturas de Henri Matisse de la década del 40. Patricia, la dueña, estaba presente en la casa mientras se llevaba a cabo el procedimiento pero no dio ningún tipo de explicación.

Friedrich Kadgien fue una pieza clave del aparato económico nazi dentro del Ministerio del Interior prusiano, donde adquirió experiencia en la burocracia estatal y en el manejo de asuntos financieros complejos. Sus colegas lo apodaron "el mago de las finanzas" debido a su extraordinaria habilidad para mover activos ilegales fuera de Alemania sin dejar rastros: era un maestro del blanqueo de dinero que operaba a escala internacional.

Los expertos de la Agencia neerlandesa del Patrimonio Cultural (RCE) aseguran que “no hay razón para pensar que sea una copia”. Si bien señalaron que “las medidas coinciden con la información disponible”, únicamente a través de un examen del reverso se podría confirmar de manera definitiva la veracidad gracias a las marcas o etiquetas originales de la pintura.

Los herederos del comerciante judío Jacques Goudstikker lograron recuperar 202 de las 1.100 piezas robadas durante la Segunda Guerra Mundial. Ahora, reclaman "Retrato de una dama” aunque saben que no será una tarea fácil. "El objetivo de mi familia es recuperar cada pieza robada de la colección y restaurar su legado”, afirmó Marei von Saher, de 81 años.