China: pagan por ir a una oficina para fingir que trabajan
Como te ven, te tratan. Jóvenes de entre 25 y 30 años que están desempleados pagan para no parecer inútiles
La era del homeoffice terminó, especialmente en China. Ahora la tendencia es ir a la oficina pero no para trabajar, sino para fingir. Sí, pagarle a una empresa para simular que trabajas para ella es la nueva moda entre los jóvenes desempleados de ese país. Por este motivo, son cada vez más las empresas que proveen este servicio.
En un contexto de desaceleración de la economía y del mercado laboral donde es cada vez más difícil encontrar trabajo, jóvenes de entre 25 y 30 años optan por salir de sus casas, pagar para ir a una oficina todos los días y aparentar tener un empleo. Los valores pueden oscilar entre los 30 y 50 yuanes (entre US$4 y US$7) al día con almuerzo y bebidas incluido.
En Dongguan, ciudad ubicada a poco más de 100 km de Hong Kong, hay una empresa llamada Pretend To Work Company que ofrece este servicio. Sin embargo, este tipo de empresas ya están surgiendo en otras importantes ciudades como Shenzhen, Shanghái, Nanjing, Wuhan, Chengdu y Kunming que cuentan con oficinas equipadas para este fin.
Feiyu, propietario de la empresa Pretend to Work asegura: “Lo que vendo no es un puesto de trabajo, sino la dignidad de no ser una persona inútil”. Asimismo, afirma que el 40% de sus clientes son recién graduados universitarios que van a sacarse fotos para demostrar a sus antiguos tutores que hacen pasantías. Otros, para lidiar con la presión de sus padres.
Aquellos jóvenes que pagan por este servicio se presentan en las oficinas donde tienen acceso a las salas de reuniones y computadores que pueden usar para buscar un verdadero trabajo. Muchos creen que el ambiente que hay en estas oficinas mejoraría su autodisciplina. Y es que algunos llegan a las 8 de la mañana y se van después de las 23 horas.
Actualmente en China, el porcentaje de desempleo juvenil supera el 14%. Según las estadísticas, incluso los graduados universitarios más calificados tienen dificultades para encontrar trabajo. La situación de desempleo juvenil es tan crítica que el Gobierno de Xi Jinping dejó de publicar estos datos concretos durante meses.