En un contexto donde las redes sociales son sinónimo de éxito, visibilidad y negocio, los recientes asesinatos de influencers en Argentina y distintos países de América Latina revelan un costado mucho más siniestro. Lejos de ser simples espacios para conectar con seguidores, las plataformas digitales también exponen a sus protagonistas a un nivel de riesgo que crece de manera alarmante. Obsesiones personales, violencia de género, crimen organizado y ajustes de cuentas se cruzan en esta trama de muertes que sacude al mundo digital.

Venezuela: Gabriel Jesús Sarmiento, el tiktoker asesinado en vivo

El 22 de junio de 2025, el joven tiktoker Gabriel Jesús Sarmiento, de 25 años, fue asesinado en su casa de Maracay, Venezuela, mientras realizaba un livestream en TikTok. Durante la transmisión, en la que denunciaba los vínculos entre bandas criminales y policías corruptos, dos sicarios armados ingresaron a su vivienda y le dispararon frente a la cámara. El crimen fue visto en directo por decenas de seguidores y luego viralizado.

Gabriel Jesús Sarmiento, el tiktoker asesinado en vivo.

El caso de Sarmiento refleja cómo la exposición en redes puede convertir a un creador de contenido en blanco de organizaciones criminales, sobre todo en un contexto tan violento como el venezolano. La Fiscalía, que investiga el asesinato, ha señalado que el joven había recibido amenazas tras denunciar a bandas como El Tren de Aragua.

México: el feminicidio de Valeria Márquez, ejecutada en pleno vivo

El 13 de mayo de 2025, en Zapopan, Jalisco, México, la influencer Valeria Márquez, de 23 años, fue asesinada a balazos mientras transmitía en vivo desde un salón de belleza. Un hombre que fingió ser repartidor ingresó al local, preguntó por ella y la ejecutó con varios disparos en la cabeza y el pecho, en presencia de los seguidores conectados.

El caso, que las autoridades investigan como feminicidio, generó enorme conmoción en México. Se sospecha que el crimen podría estar vinculado a una relación sentimental con un líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Estados Unidos incluso sancionó a miembros del cartel, señalando este asesinato como uno de los motivos.

Colombia: María José Estupiñán, asesinada frente a su casa

En Cúcuta, Colombia, el 15 de mayo de 2025, la influencer María José Estupiñán, de 22 años, conocida como “La Mona”, fue asesinada a tiros por un hombre que simuló ser repartidor. El ataque, captado por cámaras de seguridad, ocurrió en la puerta de su domicilio.

María José Estupiñán

El caso es investigado como feminicidio. La joven había denunciado a su exnovio por violencia de género, y todo apunta a que fue él quien organizó el ataque. Su muerte reavivó las protestas en Colombia contra la falta de protección estatal a las mujeres víctimas de violencia machista.

Chile: el crimen de “Ina”, la Narco Queen

En Chile, la tiktoker Sabrina Durán Montero, de 24 años, conocida como “Ina” o la “Narco Queen”, fue asesinada el 23 de octubre de 2023 en Padre Hurtado, Región Metropolitana. Mientras se dirigía a un salón de belleza, fue interceptada por tres sicarios que le dispararon en la cabeza. El video del crimen circuló en redes en cuestión de minutos.

La joven había sido condenada por narcotráfico y ostentaba un estilo de vida lujoso en redes sociales, lo que habría motivado el ajuste de cuentas entre bandas rivales.

Sabrina Durán Montero

El femicidio de Catalina Gutiérrez en Córdoba

En Argentina, el caso de Catalina Gutiérrez, de 21 años, impactó a la sociedad. Influencer con más de 80 mil seguidores en Instagram y 36 mil en TikTok, y estudiante de arquitectura, desapareció el 17 de julio de 2024. Su cuerpo fue hallado dos días después, estrangulado y calcinado dentro de un automóvil en Córdoba.

Catalina Gutiérrez

El autor del crimen fue identificado como Néstor Soto, compañero de facultad, quien confesó haberla asesinado por una obsesión enfermiza. El femicidio volvió a poner en el centro del debate el peligro que enfrentan las mujeres en entornos digitales.

El brutal ajuste de cuentas contra Fernando Pérez Algaba

En Buenos Aires, el asesinato de Fernando Pérez Algaba, de 41 años, conocido como “Lechuga”, estremeció el mundo de las criptomonedas. El influencer cripto, con casi un millón de seguidores en Instagram, desapareció el 19 de julio de 2023. Días después, su cuerpo desmembrado apareció en una valija arrojada a un arroyo.

Fernando Pérez Algaba

La investigación reveló que Pérez Algaba tenía deudas millonarias vinculadas al negocio cripto y había recibido más de 200 amenazas. Las autoridades investigan el crimen como un ajuste de cuentas vinculado al mundo del crimen organizado.

El misterioso final de “Un León Viajero”

Otro caso resonante en Argentina fue la muerte de Leonel Esteban Borroni, conocido como “Un León Viajero”, influencer con más de 140 mil seguidores. Borroni fue hallado muerto en mayo de 2024, poco después de ser arrestado en una causa por pornografía infantil. Si bien la muerte fue inicialmente atribuida a un suicidio, la investigación sigue abierta por sospechas de irregularidades.

Leonel Esteban Borroni, conocido como “Un León Viajero”.

La cara oculta de la exposición en redes

Los asesinatos de estos influencers en América Latina muestran cómo el éxito en redes puede derivar en situaciones de altísima vulnerabilidad. La exposición constante, la falta de privacidad, el contacto con desconocidos y la monetización de la imagen personal generan un entorno riesgoso, especialmente en sociedades donde la violencia de género y el crimen organizado operan con fuerza.

Además, la falta de marcos legales claros y protocolos de protección adecuados frente a amenazas digitales agrava la situación. La mayoría de los influencers no recibe formación en ciberseguridad ni cuenta con protección especializada, quedando expuestos a ataques virtuales y físicos.