Crece la tensión en Estados Unidos ante la suspensión del programa de Jimmy Kimmel, la cual pone en jaque los límites del humor y la creciente polarización entre los partidos políticos de dicho país. El conflicto se desató tras un comentario del conductor sobre el asesinato del activista conservador Charlie Kirk, que generó repudio en los sectores republicanos. 

La cadena ABC, una de las afiliadas al grupo Nexstar Media, decidió suspender “indefinidamente” el ciclo, en medio de la presión política y social. Las declaraciones que habrían generado malestar hacían referencia a la “capitalización” del asesinato de uno de los seguidores más fervientes de Donald Trump asesinado en la Universidad de Utah.

“Muchos en MAGA land están trabajando muy duro para capitalizar el asesinato de Charlie Kirk”, aseguró el conductor, en referencia al movimiento Make America Great Again. ”La pandilla MAGA trató desesperadamente de tildar a este muchacho (Tyler Robinson) de cualquier cosa menos de ser uno de ellos y de hacer todo lo posible por sacar rédito político”, sumó.

Las declaraciones de Jimmy Kimmel que derivaron en la cancelación del show

Asimismo, ridiculizó a Donald Trump al mostrar la respuesta del mandatario ante la pregunta de un cronista que quiso saber “cómo sobrellevaba el asesinato de Charlie Kirk”. "Creo que muy bien”, respondió el presidente de Estados Unidos, desviando rápidamente la conversación hacia la construcción de una nueva sala de baile en la Casa Blanca. 

Andrew Alford, presidente de la división de radiodifusión de Nexstar, consideró que “los comentarios sobre la muerte de Kirk son ofensivos e insensibles en un momento crítico para el discurso político nacional”. Horas más tarde, la cadena ABC anunció la suspensión de manera indefinida del ciclo del humorista que había iniciado en 2003.

Trump, por su parte, publicó un mensaje en redes que decía: “Buenas noticias para Estados Unidos: el programa de Jimmy Kimmel, con sus bajos índices de audiencia, ha sido cancelado. Felicitaciones a ABC por finalmente tener el coraje de hacer lo que debía hacerse. Kimmel no tiene talento y tiene peores índices de audiencia que incluso Colbert, si cabe. Eso deja a Jimmy y Seth, dos completos perdedores, en Fake News NBC. Sus índices de audiencia también son pésimos".