Tiene 95 años y es el líder de un club de fans de Taylor Swift
Luego de conocer las canciones de la artista, el abuelo quedó encantado con su música y decidió crear su propio club al cual se anotaron residentes y enfermeras
La fiebre swiftie no discrimina por género, nacionalidad ni tampoco edad. A sus 95 años, Frank Uryasz Jr. se convirtió en el líder de un club de fans de Taylor Swift en el centro Remington Heights, en Nebraska, Estados Unidos. El club se creó en agosto de 2025 y sueña con una visita de la artista, quien está invitada a jugar el bingo con todos los residentes del asilo.
Fue “Timeless” la canción que deslumbró por completo a Frank, la cual llegó a sus oídos por recomendación de Sarah Zajic, su terapeuta ocupacional. Gracias a esto, empezó a compartir la música con sus compañeros de geriátrico y, poco a poco, la imagen de Taylor comenzó a aparecer en eventos internos.
En una entrevista que realizó The Washington Post en el asilo, podían verse a los miembros del club luciendo pins que decían “Amo a Taylor”. Además, sonaban sus canciones durante la fisioterapia y Frank mostró el merchandising que poseía como, por ejemplo, un andador personalizado con la imagen de Taylor.
Las reuniones del club ocurren durante las sesiones de bingo y otras actividades sociales tres días a la semana. Frank cuenta en su habitación con recortes periodísticos de la artista, los cuales presume ante las terapeutas y enfermeras. Además, crea sus propias “friendship bracelets” y cookies decoradas.
De acuerdo con los organizadores, la presencia de Swift en las conversaciones diarias modificó los hábitos sociales en la comunidad. Los residentes, que antes se refugiaban temprano en sus habitaciones, ahora se quedan en el comedor conversando y escuchando música de la artista estadounidense.
La terapeuta ocupacional reveló que el entusiasmo por el club superó las expectativas: si bien Frank planeaba limitar la membresía a solo 20 personas, terminó llegando a 100 en pocas semanas. Algunas enfermeras externas a la residencia pidieron participar y, por este motivo, se aumentó el cupo.
Como a Frank se le complica escuchar las canciones de Taylor en formato digital, le pidió a las autoridades del geriátrico un tocadiscos para poder escuchar los álbumes de la artista en formato vinilo. Mientras tanto, continúa organizando eventos temáticos para mantener activo el club de fans del cual es líder.
Decidido a conocer finalmente a Taylor, Frank le escribió una carta donde le expresó sus deseos por recibirla en el geriátrico para una partida de bingo. En el mensaje, le habló de su historia de amor de más de siete décadas con su esposa y le regaló algunos consejos para un matrimonio duradero.