Luego de la derrota del domingo en las elecciones, la sede del Partido Justicialista bonaerense en La Plata apareció empapelada con carteles en contra de Máximo Kirchner, presidente de la agrupación. El hijo de Cristina Kirchner es el apuntado por varios peronistas cansados de su poder y sus fracasos.

El hecho de haber perdido en la Provincia de Buenos Aires contra una lista encabezada por un candidato eliminado por sus vínculos con el narcotráfico como José Luis Espert fue el colmo para muchos dentro del PJ. En 18 días Diego Santilli logró que La Libertad Avanza revirtiera una ventaja de 13 puntos y muchos señalan a Máximo como uno de los culpables de esta catástrofe electoral para Fuerza Patria.

“El Partido Justicialista no es tu monarquía”, “Devuelvan al PJ a los peronistas”, “Máximo: el PJ no es tu juguete”, “Basta de herederos y vencidos” fueron algunos de los mensajes que pegaron en las puertas de la sede el lunes por la madrugada y que rápidamente fueron retirados por los empleados al llegar.

Esto expone la interna peronista. Hay quienes apoyan al líder de La Cámpora y quienes entienden que es hora de despegarse definitivamente. Todo esto sucede justo en un año de elecciones dentro del PJ porque en diciembre se votarán nuevas autoridades.

Máximo Kirchner, quien cuestionó a los intendentes por no haberse movilizado lo suficiente en los comicios legislativos de octubre, es actualmente el presidente del partido a nivel provincial, mientras que su madre es la jefa a nivel nacional. El puesto del heredero tambalea más que nunca.