Alberto Fernández volvió esta mañana a la escena de las redes sociales con un posteo que, aunque en apariencia inofensivo, generó múltiples lecturas políticas y personales. Desde su departamento en Puerto Madero, el expresidente presentó a su nueva “mascota” y sorprendió al mostrar la llegada de Lennon, un perro de raza border collie que se suma a su vida junto a Dylan, su histórico compañero y uno de los símbolos más recordados de su paso por la Residencia de Olivos

“Hace mucho que no saben nada de mí. Ahora hablan de otros ‘perros consejeros’. Les cuento que no ando bien de salud y llegó para hacerme compañía Lennon. Dylan y Lennon juntos, el sueño de Alberto cumplido. Bienvenido querido Lennon”, escribió el exmandatario en su cuenta de Instagram, acompañado por fotos íntimas en las que se ve a ambos animales recorriendo su hogar.

Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)
Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)
Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)
Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)

La publicación aparece en medio de un escenario adverso para Alberto Fernández, tanto en lo personal como en lo político. En lo íntimo, enfrenta una causa por violencia de género tras la denuncia de su expareja, Fabiola Yáñez, madre de su hijo, quien lo acusó de agresiones físicas. A este frente judicial se suma su situación en la causa de los seguros, donde el fiscal ante la Cámara Federal porteña, José Luis Agüero Iturbe, pidió revocar el procesamiento dictado por el juez Sebastián Casanello. Ese expediente había implicado para el expresidente un millonario embargo y la prohibición de salir del país bajo los cargos de administración fraudulenta y negociaciones incompatibles con la función pública.

El regreso de Alberto Fernández al plano público ocurre en un contexto político atravesado por la incertidumbre y el proceso de reorganización del peronismo. Sin poder real de influencia, el expresidente quedó relegado de las discusiones de peso dentro del espacio, que hoy se debate entre la conducción de los gobernadores, el rol de Cristina Kirchner y la figura de Axel Kicillof, frente a la necesidad de reconstruir un proyecto opositor ante el avance de Javier Milei.

En ese marco, Fernández intentó reaparecer en el escenario mediático a través de una entrevista en la que elogió a Sergio Massa, de quien en su momento fue jefe de campaña. Sin embargo, aquellas declaraciones no generaron impacto político y quedaron rápidamente en el olvido. Por eso, hoy su exposición pública parece girar más en torno a sus mascotas que a la discusión política de fondo.

Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)
Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)
Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)
Dylan junto a Lennon, los perros de Alberto Fernández. (Instagram)

La postal con Dylan y Lennon se presenta, entonces, como una especie de refugio personal para un dirigente que perdió la centralidad política y que hoy atraviesa un tiempo de aislamiento, complicaciones judiciales y distanciamiento dentro del propio movimiento que lo llevó a la presidencia.