Bullrich en Diputados: cruce por los femicidios y alquilar por Airbnb
La ministra de Seguridad defendió su gestión en la Comisión de Presupuesto y Hacienda
En una de las exposiciones más intensas desde que asumió como ministra de Seguridad, Patricia Bullrich defendió este martes en la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados el destino de los $7,8 billones que su cartera tendrá en el Presupuesto 2026. Con su estilo frontal, la funcionaria no solo desgranó los números del ministerio, sino que aprovechó el escenario para polemizar con la oposición y reafirmar su sello político.
El eje que más llamó la atención fue su explicación sobre la situación habitacional de las fuerzas federales. Bullrich reveló que en distintos puntos del país, especialmente en zonas turísticas o de difícil acceso, los efectivos no tienen dónde vivir, al punto de tener que recurrir a alquileres por plataformas temporarias. “Le voy a dar un ejemplo, El Chaltén. En El Chaltén conseguir una vivienda es imposible y los miembros de las fuerzas de seguridad que están allí tienen que alquilar algunas veces viviendas por Airbnb. Es un problemón”, afirmó, ante la mirada atenta de los legisladores.
La ministra explicó que ese contexto motivó un trabajo conjunto con el Ministerio de Economía, a partir del cual Seguridad comenzó a recibir la cesión de viviendas del Estado nacional. “Nos traspasaron unidades que no son personales, son unidades funcionales. Las utilizan los miembros de las fuerzas de seguridad que van por destino a los lugares donde nos otorgan estas viviendas”, aseguró. Según detalló, las transferencias ya alcanzaron a Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Tierra del Fuego y la Ciudad de Buenos Aires, aunque admitió que la cobertura sigue siendo insuficiente: “Nos falta un montón, imagínense que no tenemos en muchísimos de los lugares donde es caro vivir”, reconoció.
Bullrich planteó que el objetivo del programa es “dar previsibilidad y dignidad” a los efectivos, sobre todo en destinos donde el costo de vida supera ampliamente los sueldos policiales. Su argumento fue bien recibido por algunos legisladores oficialistas, pero generó críticas de la oposición, que cuestionó la falta de un plan nacional de infraestructura y vivienda de largo plazo.
A la defensiva, Bullrich apeló a su estilo combativo: “Tenemos lo que el país puede brindar”, sentenció. “Son $7,8 billones destinados a profundizar la política de mejora continua, eficiencia e innovación. El 29,5 % se destinará a aviación, 25,8 % a tecnología y 15,1 % a automotores. La lucha contra el narcotráfico tendrá un incremento del 84 %. Faltan recursos, sí, pero tenemos lo necesario para seguir transformando el sistema de seguridad.”
El momento más tenso de la jornada llegó cuando Bullrich fue interpelada por Vilma Ripol cuando se puso sobre la mesa el presupuesto destinado a políticas de género y la supuesta falta de recursos para la prevención de femicidios. Con tono firme, la ministra se lanzó contra quienes “quieren inflar cifras para cuestionar al Gobierno”.
“Si usted me dice que hay 178 femicidios y hay 126 muertes, me agarran de boluda a mí”, lanzó contra Ripoll, generando murmullos en la sala. “A ver, ustedes quieren que haya femicidios porque ponen una cifra que no existe. Cuando bajamos los homicidios, igual quieren insistir en que los hay. Los estamos bajando. Acéptenlo. Un gobierno liberal baja femicidios”.
Bullrich aseguró que las estadísticas oficiales, producidas por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, muestran una reducción del 9% entre 2023 y 2024. “Este año la baja va a ser enorme, enorme. Lo que pasa es que no lo quieren entender, porque no pueden aceptar que un gobierno liberal protege más a las mujeres que un gobierno como el que había antes. Esa es la verdad”, remató.
Sus palabras generaron una fuerte reacción entre las bancadas opositoras, que la acusaron de banalizar la problemática. Bullrich, fiel a su estilo, redobló la apuesta: “No les entra en la cabeza. Tan cuadrados con la cabeza y no les entra. Bueno, es la verdad, le guste o no le guste".
Otro de los puntos centrales de su exposición fue el avance del nuevo Código Penal, proyecto que el Gobierno busca enviar al Congreso antes de fin de año. Bullrich aseguró que la iniciativa “agrava los delitos más comunes, como el homicidio”, y que introduce un capítulo completo dedicado a los delitos informáticos, con nuevas figuras que antes estaban dispersas.
Entre los ejemplos que mencionó, destacó uno que generó sorpresa entre los diputados: “Hablo de nuevas figuras delictivas, como el retiro no consentido del preservativo”. La ministra explicó que la intención del Gobierno es modernizar la legislación “de acuerdo con las transformaciones sociales y tecnológicas del siglo XXI”, y aclaró que también se prevé “incrementar fuertemente las penas por delitos de corrupción”.
“El nuevo código incorpora el soborno entre privados y rediseña la figura del enriquecimiento ilícito”, dijo, y agregó que se pondrá especial foco en el narcotráfico. “Vimos el triple femicidio, lo que pasó en Rosario. Se crean figuras autónomas, como precursores químicos y opioides sintéticos”.
Bullrich defendió el endurecimiento de penas como una herramienta de disuasión. “La ley tiene que acompañar el cambio cultural. El que comete un delito grave tiene que saber que la sanción será ejemplar. Esa es la única manera de construir seguridad duradera”, concluyó.