Difunden audios que comprometen a los hermanos Rossi en Santa Fe
El periodista Luis Gasulla difundió comentarios de Alejandro Rossi sobre los negocios familiares
En medio de una de las elecciones más reñidas de los últimos años en Santa Fe, una investigación televisiva encendió la polémica. Durante el programa de LN+ conducido por Luis Majul, el periodista Luis Gasulla presentó una serie de audios que comprometen directamente a Alejandro Rossi —hermano del ex ministro Agustín Rossi— con la propiedad de Autobuses Santa Fe, una de las empresas de transporte más importantes de la provincia, beneficiada durante años por subsidios estatales.
El dato no es menor: la compañía creció bajo un esquema de subsidios estatales, en el corazón de un sistema que desde hace más de una década es señalado por beneficiar a empresarios cercanos al poder.
Santa Fe es un distrito electoral clave, con casi tres millones de votantes habilitados, y atraviesa una de las contiendas más reñidas de los últimos años. Pero en medio de la campaña, el apellido Rossi —históricamente vinculado al peronismo santafesino y al kirchnerismo— vuelve a quedar bajo el foco, esta vez no por candidaturas ni discursos, sino por una confesión en off que salió a la luz.
“Santa Fe es una provincia clave en estas próximas elecciones”, dijo Gasulla al abrir el informe, y remarcó que “están muy escondidos los protagonistas de este informe”. Y entre esos protagonistas aparecen los hermanos Rossi. Agustín Rossi fue ministro, ex jefe de la Agencia Federal de Inteligencia y candidato a vicepresidente. Su hermano Alejandro fue diputado nacional y tuvo un rol destacado en la política local durante los gobiernos kirchneristas. Ambos son viejos conocidos del entramado santafesino, con una influencia que excede los cargos formales.
Según contó Gasulla, Elisa Carrió ya había denunciado en 2012 que “el verdadero dueño de las empresas de transporte en Santa Fe con los negocios de los subsidios al transporte a través de Julio De Vido son los Rossi”. En ese momento, las acusaciones no prosperaron. Hoy, la situación cambió: hay audios que involucran directamente a Alejandro Rossi.
Los mensajes de voz fueron enviados en noviembre de 2024 a un familiar cercano del ex diputado y, según Gasulla, “esa persona se la reenvió a nuestra fuente que tuvimos contacto hace apenas unos pocos días. Después de chequear la información, lo pusimos al aire”. En uno de los audios, Rossi admite: “el que tenía el verdadero peso de la empresa era yo”.
La empresa en cuestión es Autobuses Santa Fe, un gigante del transporte provincial que también opera en otras zonas como Neuquén. Durante la década pasada, creció de manera exponencial a partir de un esquema de subsidios al transporte implementado por el gobierno nacional. Ese sistema, financiado con fondos públicos, se basa en otorgar compensaciones a empresas privadas para mantener tarifas más bajas. En teoría, busca garantizar el acceso al transporte para la población. En la práctica, durante años fue señalado por su opacidad y por beneficiar a grupos empresariales cercanos al poder político.
En los papeles, la empresa no está a nombre de Rossi, sino de Gerardo Ingaramo. Pero en el audio, Alejandro Rossi es claro: “en los papeles figuraba Ingaramo, pero la empresa la hice yo”. Según Gasulla, durante años los Rossi negaron tener participación en la firma, asegurando que eran apenas socios minoritarios. Sin embargo, en estos audios se presenta una versión distinta: la de un esquema de propiedad oculta donde Ingaramo figura formalmente, pero el control real estaría en manos del dirigente político.
Este tipo de estructuras no es nueva en Argentina: empresas que operan con subsidios públicos mientras ocultan a sus verdaderos dueños han sido señaladas en distintas provincias. Pero el caso de Santa Fe tiene un condimento particular: se trata de la provincia que, en los próximos comicios, podría inclinar la balanza nacional. Y el apellido Rossi no es menor en ese escenario.
“Hasta este momento los Rossi nunca se hicieron cargo de ser los dueños de las empresas de transporte y dijeron que eran unos socios minoritarios. Acá lo vas a escuchar confesando”, dijo Gasulla en el programa. Y agregó que “el gran dato es que los Rossi cada vez que vos les preguntabas decían ‘nosotros no tenemos nada que ver con la empresa y no recibimos plata del Estado’”.
Los audios se suman a un historial de denuncias no judicializadas pero persistentes en el tiempo. Carrió fue la primera en ponerlos en la mira hace más de una década. El impacto político aún está por verse, pero llega en un momento delicado. Santa Fe es uno de los distritos más observados de cara a las elecciones nacionales y provinciales. Con un escenario dividido en tercios y final abierto, cualquier golpe mediático puede tener consecuencias. Los hermanos Rossi —parte del del poder santafesino en el ecosistema kirchnerista— quedan así en el centro de una tormenta.
En Santa Fe, los subsidios al transporte no son solo un tema técnico: son un negocio millonario. Y si se confirma que una de las familias políticas más influyentes de la provincia tuvo un rol directo en su control, el escándalo recién comienza.