La controversia alrededor del economista y diputado liberal José Luis Espert volvió a ocupar la agenda política. La denuncia del dirigente social Juan Grabois, sumada a documentación proveniente de Estados Unidos, abrió un nuevo capítulo en torno a los supuestos aportes financieros que el narcotraficante argentino Fred Machado habría realizado a la campaña del actual presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados.

El detonante fue la revelación de una transferencia de 200.000 dólares, registrada el 1 de febrero de 2020, desde el fideicomiso Aircraft Guarantee Corp., vinculado tanto a Machado como a su socia Mercer-Erwin. Según la fiscalía de Texas, ese fideicomiso formaba parte de un esquema Ponzi que llegó a defraudar alrededor de 350 millones de dólares mediante la comercialización de aviones que nunca existieron. Machado, detenido desde abril de 2021 en Viedma, Río Negro, espera ser extraditado a Estados Unidos, acusado de integrar “una conspiración para producir y distribuir cocaína” en territorio argentino.

Durante una entrevista en el canal TN con el periodista Franco Mercuriali, Espert buscó desmarcarse de las acusaciones y calificó la presentación judicial de Grabois como parte de una maniobra política. “La anunciada presentación en tribunales de Juan Grabois en mi contra por este tema es parte de la campaña sucia que vienen haciendo contra mi persona desde 2021; siempre vuelven con lo mismo”, se quejó.

José Luis Espert habló de su vínculo con Fred Machado (Crédito: TN)

El legislador insistió en que se trata de operaciones similares a las que en su momento perjudicaron a otros dirigentes políticos: “Es lo mismo que le hicieron a Enrique Olivera, a quien le adjudicaron una cuenta falsa supuestamente sin declarar; lo que le pasó a Francisco De Narváez pocos días antes de una elección o lo que tuvo que soportar también Patricia Bullrich antes de otros comicios”.

En la misma señal televisiva, admitió haber viajado en un avión privado de Machado, aunque lo minimizó señalando que fue un único encuentro: lo habría conocido en enero o febrero de 2019, cuando lo trasladó a Viedma para una presentación de su libro. “Yo agradecí a una persona que me habían presentado, que quería presentar mi libro en Viedma, y obviamente la agradecí porque me llevó en su avión; se imaginan que si yo sabía quién era no hubiera agradecido a los cuatro vientos”, aseguró.

No obstante, la versión de Espert fue rápidamente puesta en duda. Según el periodista Sebastián Lacunza y los documentos judiciales que circularon en redes sociales, los contactos entre el diputado y el empresario fueron más frecuentes y estrechos.

De acuerdo con esa información, ambos se reunieron por primera vez en marzo de 2019 en el aeropuerto de San Fernando, ocasión en la que se habría concretado el aporte de Machado a la campaña: avión, auto y dinero en efectivo. El 18 de abril de ese mismo año viajaron juntos a Viedma en el avión King Air, donde Espert presentó su libro en el Hotel Austral. En esa ocasión, incluso habría visitado la residencia personal de Machado.

Las versiones sostienen que el 5 de junio de 2019 Machado viajó desde Londres a Buenos Aires para participar en reuniones en las que se analizaba la candidatura vicepresidencial de figuras como Facundo Manes, Óscar Ruggeri y Alberto Cormillot. Luego, en julio, habría vuelto al país y participado de una cena en la casa de Luis Rosales y de encuentros en el hotel Four Seasons con miembros de la campaña del Frente Despertar.

La relación, aseguran, se mantuvo incluso después de las elecciones de 2019. La contabilidad atribuida a Machado en Texas registra la mencionada transferencia de 200.000 dólares a principios de 2020, y un mes después Espert habría adquirido un BMW valuado en 90.000 dólares. Habrá que esperar a ver si la denuncia que hará Juan Grabois avanza o no para poder saber más sobre el vínculo —o no— del candidato de LLA y Fred Machado.