Uno por uno: los grandes perdedores de la elección
Los resultados de las legislativas expusieron los cachetazos que recibieron varias figuras de la política
En toda elección hay ganadores y perdedores. Mientras los focos se posan sobre los primeros, nosotros enfocamos a los segundos.
La gran derrotada de los comicios fue la bailarina de San José 1111, que después de que se conocieran los resultados salió al balcón a divertirse con los militantes que allí le cantaban y le ponían ritmo a la esquina de Recoleta. Cristina Kirchner fue la armadora de las listas de Fuerza Patria y así le fue.
Después del gran triunfo del partido en las legislativas provinciales en Buenos Aires de septiembre, esta vez en octubre la cosa se dio vuelta. Jorge Taiana, el candidato mudo, perdió con el Colo Santilli; y en Capital Federal, Itahi Hagman y Mariano Recalde no pudieron llegar al 27% y sufrieron una paliza a manos de Patricia Bullrich, que superó el 47%. En esta lista de perdedores hay que sumar a Juan Grabois, otro de los candidatos en la lista bonaerense que no pudo conquistar al electorado, pese a que se unirá al Congreso a partir del 10 de diciembre.
En esta bolsa de derrotados están también Máximo Kirchner, Sergio Massa y Axel Kicillof. Las caras detrás del armado peronista nacional que sufrió un golpazo electoral. El gobernador, al menos, se animó a agarrar el micrófono y hablar en el búnker ante los militantes, mientras que los otros dos se limitaron a quedarse atrás, en silencio.
Cuando se analizan perdedores, en el podio están también los gobernadores. La alianza entre Martín Llaryora, Juan Schiaretti, Maximiliano Pullaro e Ignacio Torres intentó posicionarse como una ancha avenida del medio terminó siendo apenas un pasaje que no solo perdió en provincias donde debió haber sido fuerte, como Córdoba o Santa Fe, sino que además en algunos distritos terminó en cuarto o quinto lugar. Así, a nivel nacional sumó apenas 8 diputados y ningun senador.
En esta agrupación de derrotados están Florencio Randazzo y Martín Lousteau. El primero obtuvo apenas 2,8% en Provincia de Buenos Aires, por debajo incluso de la Izquierda y del abogado mediático Fernando Burlando. El segundo arañó el 6% en CABA y se aseguró entrar él solo al Congreso. Flojísima performance de ambos.
Pero si hablamos de flojas actuaciones electorales hay que hacer mención especial para aquellos que se la jugaron en soledad creyendo que podían convencer al electorado de salir de la polarización. Facundo Manes, por ejemplo, quiso ser senador por Capital Federal y con el 2,31% de los votos se quedó afuera de todo. Lo mismo le pasó a Ricardo López Murphy, cuya gran campaña en redes y el lema de “coherencia” le permitió sacar el 4% de los votos y tampoco le alcanzó.
Lo mismo para Daniel Lipovetsky, recordado por impulsar la Ley de Alquileres, a quien lo votaron solamente 6.100 personas en Capital Federal. Por su parte, en Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Talerico sacó el 0,7% y Ricardo Alfonsín, que fue muy original en redes, quedó con el 0,6%.
Otra figura que salió golpeada fue Elisa Carrió. La líder de la Coalición Cívica vio desangrarse a su partido que tras la ruptura de Cambiemos apostó por ir en soledad con Marcela Campagnoli al Senado y Hernán Reyes a Diputados. Ambos afuera, con menos de 30 mil votos obtenidos en CABA.