Estar preso, en general, no está bueno. Las personas que cumplen prisión efectiva en Argentina sufren la falta de alimentos, elementos de higiene personal y otras cuestiones. En general, ese suministro depende de la buena voluntad de las familias de los presos, que muchas veces tienen que viajar varios kilómetros para visitar a sus seres queridos privados de su libertad. 

Ese problema puede terminarse (o al menos aliviarse) pronto con el lanzamiento de Penal Market, una especie de “Rappi para presos”. Creado por tres mujeres argentinas “del derecho”, el servicio se lanza este lunes 15 de septiembre. “Llegamos para que las visitas cambien para siempre”, asegura una de sus creadoras.

PENAL MARKET

Penal Market promete la posibilidad de hacer el pedido online, con entrega “directo en la unidad” y “mismo precio que en tu barrio”. Se entiende que la idea es que sea usada por los propios familiares de los detenidos, ya que el uso de teléfonos está prohibido en los penales argentinos.

“Tenemos nuestros propios depósitos, donde se prepara cada pedido desde cero. Trabajamos con mercadería propia, garantizando calidad, control y seguridad. Contamos con nuestro equipo especializado, que se encarga de armar y entregar directamente. Y lo más importante: las entregas se hacen en las unidades en cajas inviolables, con total transparencia y confianza”, prometen en las redes sociales del servicio.

Cuando se lance, Penal Market ofrecerá productos de almacén “(comestibles, limpieza, higiene personal)” y otros de su tienda oficial “(indumentaria, bazar, electrónica, tecnología, blanquería, juguetes, etc.)”. “Todos los productos están seleccionados según las normativas de cada penal”, afirman.

Por las dudas, en su sitio web avisan: “Nosotros nos encargamos de la preparación, auditoría y entrega segura de tu pedido directamente en la penitenciaría, teniendo en cuenta que la recepción final de los paquetes estará sujeta al diagrama interno de cada establecimiento”.