El gran año de las gaseosas: nuevos negocios y mayores ventas
A pesar de tener un 2024 para el olvido, el rubro viene teniendo un gran 2025. El fenómeno de lo popular y el crecimiento de las primeras marcas.
Después de un 2024 crítico para la industria de bebidas sin alcohol, el año 2025 marca un punto de inflexión en el consumo de gaseosas en Argentina. Un crecimiento interanual del 23,7% en el volumen de ventas de Coca-Cola Andina en el país y una millonaria operación que sacudió al sector —la compra de Prodea por parte de Manaos— son los dos hitos que explican el repunte de un mercado que, hace poco más de un año, estaba en franca caída.
Según su balance del segundo trimestre de 2025, Coca-Cola Andina logró un crecimiento del 51,3% en sus ganancias, impulsado en gran parte por el desempeño del mercado argentino. "El volumen de venta llegó a 207,5 millones de cajas unitarias, un crecimiento de 5,3% respecto al mismo período del año anterior, impulsado principalmente por el crecimiento de 23,7% en el volumen de nuestra franquicia en Argentina", señaló Miguel Ángel Peirano, vicepresidente ejecutivo de la compañía.
Ese número, además, se traduce en un dato más profundo: Argentina recuperó más del 75% del volumen perdido durante el segundo trimestre de 2024, cuando el país se vio golpeado por una crisis económica que afectó de lleno al consumo masivo. El EBITDA ajustado en moneda local creció un 110,6%, consolidando al país como uno de los motores de la expansión regional de la embotelladora, junto a los crecimientos más modestos de Chile (3,5%) y Brasil (1%).
En paralelo, el otro gran sacudón de este 2025 lo dio Manaos, la empresa que fundó Orlando Canido en 2004, al concretar la compra del 100% del paquete accionario de Prodea por 74 millones de dólares. La operación incluyó marcas históricas como Cunnington y Neuss, y fue ejecutada, sin intermediarios, en una negociación directa entre los dueños de ambas compañías.
Según fuentes cercanas a la negociación, la estrategia es clara: mantener a Manaos como una opción popular y accesible, y posicionar a Cunnington como la marca que le dispute mercado a Coca-Cola en el segmento premium. “Con Cunnington la idea es competir directamente contra Coca-Cola y mantener a Manaos apuntando al segmento más económico”, explicaron a LA NACION. Así, el grupo empresario se propone cubrir todas las franjas del mercado, sin fusionar estructuras ni realizar despidos.
Esta movida consolida a Manaos como un jugador clave del tablero local. La empresa, que ya había ganado presencia en todo el país, apuesta ahora a un modelo más segmentado, con marcas diferenciadas para públicos diversos. En un mercado en recuperación, esa diversificación podría ser clave.
Más allá de los grandes movimientos corporativos, los cambios también se sienten en la góndola. Según la Cámara Argentina de la Industria de Bebidas Sin Alcohol (CADIBSA), el primer trimestre de 2025 ya mostró una mejora del 7,7% respecto al mismo período del año anterior, aunque todavía está un 14,4% por debajo de 2023.
El repunte es parcial, pero sostenido. Las gaseosas, junto con las aguas y aguas saborizadas, siguen siendo líderes del sector. Sin embargo, los consumidores adoptan nuevos hábitos: aumentó la demanda de productos sin azúcar, opciones más económicas y envases retornables, una tendencia que combina razones económicas y ambientales.
En 2024, el sector había sufrido una caída del 13% interanual, atravesado por la crisis económica y el deterioro del poder adquisitivo. Ese año, el consumo de gaseosas fue una de las primeras variables en retroceder. Pero el panorama cambió. La pregunta que sobrevuela el sector es si este crecimiento del consumo es sostenible o solo un rebote coyuntural tras la caída previa.