Máxima habló del suicidio de su hermana: “Sé mejor que nadie”

A pesar de que su vida está totalmente afincada en los Países Bajos, Máxima Zorreguieta sigue muy conectada con su familia en la Argentina, tanto para lo bueno, como para lo malo. En 2018, su hermana menor Inés se quitó la vida en Buenos Aires, un episodio devastador que no solo golpeó a la familia, sino que redefinió la forma en que la soberana concibe su función pública.

Esa historia volvió a emerger esta semana, cuando Máxima visitó un centro de investigaciones en Ámsterdam. Allí recorrió laboratorios, escuchó a expertos y presenció los avances de estudios sobre tejido cerebral en casos de suicidio. En ese ámbito de ciencia y dolor compartido, tuvo un encuentro con una madre que había perdido a su hija. Con la voz cargada de emoción, la reina le confesó: “Sé mejor que nadie lo que se siente”, según recogió el medio neerlandés Blauw Bloed.

El recuerdo de Inés es una herida abierta. Tras su muerte, Máxima decidió hablar con franqueza frente a la prensa y, lejos de refugiarse en el silencio, puso en palabras lo que atravesaba: “Estaba enferma. No podía encontrar alegría y no pudo curarse. Nuestro único consuelo es que ahora, finalmente, ha encontrado la paz”. Ese gesto rompió con la rigidez habitual de las casas reales y abrió un debate en torno al suicidio y las enfermedades mentales, un tema que suele arrastrar estigmas.

Desde entonces, la reina ha insistido en que contar su experiencia no es una muestra de debilidad, sino de compromiso. “Cuando mi hermana falleció, decidí contar con sinceridad que se había quitado la vida tras años de problemas mentales. Compartir mi historia personal me ha conmovido profundamente”, explicó en una entrevista reciente con el periodista Sam Hoevenaar. Esa decisión marcó un antes y un después en su manera de usar la visibilidad pública.

El paso más concreto llegó en 2022, cuando impulsó la fundación MIND Us, una organización dedicada a apoyar a jóvenes en situación de vulnerabilidad psicológica. El objetivo es ofrecer herramientas, promover campañas de concientización y generar políticas que fortalezcan la prevención. Para Máxima, el foco está en la adolescencia y en la primera juventud, etapas donde —según ha insistido en varias charlas— los problemas de salud mental suelen aparecer con más fuerza.

El vínculo familiar ha sido central en esta historia. Apenas se conoció la muerte de Inés, Máxima viajó a la Argentina junto a su esposo, el rey Guillermo Alejandro, y sus tres hijas. En Buenos Aires se reunieron con su madre, María del Carmen Cerruti, en un momento de duelo que expuso la unión de los Zorreguieta, más allá de las distancias y los compromisos reales.