A menos de un día de su esperada reinauguración, la histórica Escalera Imperial del Paseo Las Toscas, uno de los íconos más valiosos del patrimonio marplatense, fue blanco de actos vandálicos. Durante la madrugada, desconocidos rompieron los copones ornamentales y destruyeron las plantas recién colocadas, arruinando parte de la obra de restauración que había demandado ocho meses de trabajo.

El intendente Guillermo Montenegro repudió el hecho con dureza y anunció una denuncia penal. “Es un despropósito de los inadaptados que no merecen vivir en esta ciudad hermosa. No pueden destruir así las cosas como si no valieran nada. Estuvimos ocho meses recuperando esta maravilla”, expresó indignado. Además, adelantó que el Municipio buscará identificar a los responsables: “Vamos a hacer la denuncia penal para que se investigue a esta gente que no tiene aprecio por el esfuerzo ni por la historia”.

La restauración de la Escalera Imperial había sido declarada “de interés municipal” y representaba un hito en la recuperación del patrimonio urbano de Mar del Plata. Construida en 1903 como parte del antiguo Paseo General Paz, diseñado por el paisajista francés Carlos Thays, la escalera es el último vestigio de aquel paseo aristocrático que combinaba jardines versallescos, esculturas en mármol de Carrara y mobiliario importado de Italia.

El proyecto de recuperación, dirigido por la Secretaría de Obras y Planeamiento Urbano junto al Ente de Vialidad y Alumbrado (Emvial), implicó la reconstrucción integral de barandas, balaustres, escalones, pasamanos y copones. También se instalaron 15 farolas ornamentales y se restauró un copón francés de hierro fundido, traído a la ciudad en 1909 desde la prestigiosa fundición Val D’Osne, pieza de enorme valor histórico.

Uno de los destrozos en la escalera

La directora de Restauración de Monumentos, Constanza Addiechi, había destacado la magnitud del trabajo previo a la reinauguración. “Es una joya del patrimonio urbano. Recuperarla fue un proceso largo y minucioso, con investigación de documentos originales y contacto con el bisnieto de Thays para garantizar fidelidad histórica”, explicó. Su equipo reconstruyó más de 90 metros de pasamanos, 300 balaustres, 24 copones y 17 farolas, respetando el diseño original del siglo XX.

La escalera había sido presentada el sábado con gran emoción. Vecinos, instituciones educativas y la Banda de Música de la Base Naval participaron del acto oficial. Sin embargo, horas después, la noticia del ataque empañó la celebración y provocó indignación en toda la comunidad.

El tuit de Guillermo Montenegro

La Escalera Imperial no solo representa una obra arquitectónica única, sino también un testimonio vivo de la historia de Mar del Plata. Su restauración simbolizaba la recuperación del espíritu original de la ciudad balnearia, el mismo que Thays había imaginado hace más de un siglo.

Hoy, los daños obligarán a nuevas tareas de reparación. “Es lamentable tener que volver a trabajar por culpa de unos pocos. Pero no vamos a bajar los brazos”, aseguró Addiechi. Desde el Municipio reiteraron el compromiso de preservar la escalera y de impulsar medidas para evitar que estos ataques se repitan.